Burberry

Garden Girls, es el nombre que escogió Christopher Bailey para su nueva colección, inspirada en el propio jardín que el diseñador posee en Yorkshire y también en los conciertos de rock de la tormentosa y verde Isla de Wight.
La colección consiste en una serie de abrigos ligeros, blusones de viscosa y vestidos de verano manchados bajo la técnica degradé.
Sombreros, collares simulando hojas, pulseras de madera y medias debajo de plataformas ponen el punto final a la propuesta de esta temporada.